17/3/14

Sacerdotes y seminaristas

CARTA PASTORAL DEL OBISPO. Sois necesarios queridos hermanos sacerdotes. Hacen faltan sacerdotes para que haya Eucaristía para que haya Iglesia, para que haya laicos entregados a la implantación del Reino de Dios en el mundo, para que haya vocaciones a la vida consagrada y a la acción misionera, para gustar y ver qué bueno es el Señor y como nos ama. 
Sin ellos —sin vosotros— sin sacerdotes buenos y santos, pastores conforme al corazón de Dios no habrá futuro para la Iglesia y la misma sociedad. Con sacerdotes gozosos de su vocación podremos tener también seminaristas. En el día del seminario particularmente agradecemos que el Señor haya suscitado este mismo curso el primer seminarista mayor —Álvaro es su nombre— preparado y orientado desde el seminario menor en familia.