1/11/13

«La gente va a la iglesia a pedir, pero Dios no les importa... la gratitud debe ser lo primero»

Padre Santiago Martín, fundador de Franciscanos de María

El padre Santiago Martín, periodista y escritor de éxito es, sobre todo, un sacerdote enamorado de su vocación y fundador del pujante carisma de los Franciscanos de María, que acaba de cumplir 25 años de vida. 
El Papa Francisco ha concedido a los Franciscanos de María el regalo de proclamar un Año Jubilar en el que se podrá ganar la Indulgencia Plenaria en las diócesis en las que trabajan.  
Con el padre Santiago Martín hemos hablado de esta realidad eclesial presente en 36 países, 163 diócesis y con 562 comunidades laicales estables; además de 800 laicos consagrados y unas diez mil personas que se enriquecen de esta espiritualidad basada en el agradecimiento. 
- Hace 25 años nació el movimiento Franciscanos de María en Madrid (España) en un momento de crisis eclesial y desánimo para los católicos en general. La cristiandad se derrumbaba y se atisbaba una apostasía silenciosa unida a un laicismo beligerante. ¿Cómo sintió la llamada a fundar este carisma?

- Toda nueva realidad eclesial nace suscitada por el Espíritu Santo para resolver o contribuir a resolver un problema, sea social o espiritual. Así surgieron, por ejemplo, los salesianos en la Turín del XIX y las misioneras de la caridad en la Calcuta del XX. Justo lo que yo vi fue eso, un problema grave, pero no de tipo material sino espiritual: el alejamiento masivo de Dios, la apostasía silenciosa de un pueblo hasta hacía poco abrumadoramente católico. El Señor me llamó, sin mérito mío, a acudir a solucionar este problema, junto a otros que también estaban y están luchando en lo mismo.