A Matthew Vawter le detectaron durante su gestación síndrome
de Down, malformaciones en ambos pies, líquido alrededor de sus riñones y
ventrículos cerebrales agrandados. El médico que trataba a su madre, Amy, le
propuso abortar, pero ella y su esposo Aaron se negaron.
“Al final de todo, nos dijeron que este bebé tenía tantos
problemas, que tenía cero por ciento de posibilidades de sobrevivir”, recordó
Amy en su blog, “Matthew Nicholas Vawter”.
Una vez detectados los problemas congénitos en Mathew, el
médico que ofreció el aborto señaló a la pareja que “no hay razón” para que
ella lleve adelante “el resto del embarazo”.