El Papa habló sobre el apego a las riquezas y aseguró que
una abundancia de bienes, vivida de forma egoísta y triste, quita esperanza y
genera cualquier tipo de corrupción, grande o pequeña.
En su homilía en Casa Santa Marta, el Papa habló sobre el
apego a las riquezas y aseguró que una abundancia de bienes, vivida de forma egoísta
y triste, quita esperanza y genera cualquier tipo de corrupción, grande o
pequeña.
FRANCISCO
"El apego a las riquezas es el comienzo de todo tipo de
corrupción, en todas partes: corrupción personal, corrupción en los negocios,
incluso la pequeña corrupción comercial, de esa que quita 50 gramos al precio
justo, corrupción política, corrupción de la educación ¿Por qué? Porque los que
viven apegados a los propios poderes, a las propias riquezas, se creen en el
paraíso”.