(ACI).- Ante más de 250 participantes en el congreso de
abades benedictinos en Roma, el Papa Francisco afirmó que los monjes y las
monjas en el mundo de hoy tienen un don y una responsabilidad especial que es
mantener vivos los “oasis del espíritu”.
“En este tiempo y en esta Iglesia llamada a apostar cada vez
sobre lo esencial, los monjes y las monjas custodian por vocación un don
peculiar y una responsabilidad especial: la de mantener vivos los oasis del
espíritu para que los pastores y fieles puedan beber en los manantiales de la
misericordia divina”, dijo el Papa en la Sala Clementina en el Palacio
Apostólico del Vaticano esta mañana.