Por Andrea Gagliarducci
(ACI).- Desde octubre de 2016 las clases de religión en las
escuelas francoparlantes de primaria y secundaria de Bélgica se reducirán a la
mitad y serán reemplazadas por una hora semanal de clases del curso llamado
educación para la ciudadanía.
Los críticos advierten que a través de estas clases se
promoverá el aborto y la homosexualidad, y que como efecto final podrían
terminar por sacar de las escuelas a los profesores de religión.