Catástrofe en Filipinas: 9,5 millones de afectados. La
solidaridad de la Iglesia, en marcha
El Tifón Haiyan, que el pasado 8 de noviembre azotó el
centro de Filipinas con vientos de 275 km/h y olas de seis metros, ha dejado
tras de sí un rastro de destrucción masiva en varias islas del país. Se estima
que al menos 9,5 millones de personas han quedado afectadas en las Filipinas
como consecuencia del tifón. De ellos, más de 3 millones de personas se
encuentran en un radio de 30 kilómetros dentro de la ruta seguida por
"Haiyan" -bautizado localmente como "Yolanda"- a su paso
por Filipinas. En toda esa zona el nivel de destrucción es máximo y las
comunidades afectadas carecen de acceso al agua potable, a la comida y a la
electricidad.
Los equipos de las Naciones Unidas en el terreno han
descrito la escena desde el aire como una repetición del tsunami que asoló el
Océano Indico en 2004.
En Tacloban City se registró una subida del nivel de la
marea de casi 10 metros. Las comunidades de migrantes internos asentados de
manera irregular en la zona son las más afectadas y las que necesitan con mayor
urgencia ayuda inmediata, según informa la Iglesia local.